Os acercamos la experiencia de 12 chicos españoles, que han realizado un proyecto de Voluntariado Europeo en Ucrania.
Un Sábado caluroso de agosto, un gallego, una sevillana, una catalana, dos ceuties y siete malagueños entraron en la ciudad de Lviv al son de la banda sonora de Heidi.
Su tarea allí era compartir tiempo de juegos y risas con los niños ucranianos sin medios económicos para viajar en verano.
Este equipo de españoles se encontró con muchas dificultades: convivencia en un hostel sucio y mal equipado, choque cultural, problemas con el idioma… Pero también pasaron ratos muy divertidos juntos, viajaron, rieron, llevaron a cabo una labor muy bonita con los niños y llenaron sus mentes de momentos inolvidables.
Pese a todas las contrariedades, nos fuimos adaptando, aprendimos a saltar los baches y a coger aire en las cuestas.Y para los que era la primera vez que vivian fuera de casa, se llevan el nivel de independencia, y de saber buscarse «las habichuelas».
Por ello, esta experiencia es recomendable, siempre. Porque todo lo bueno y lo malo te forja, creces en todos los sentidos.
Hemos descubierto Lviv, una ciudad preciosa, hemos conocido nuestros rincones favoritos, y los menos favoritos, hemos saboreado su cafe y té, su comida, y su chocolate.
Todas las tardes cada pareja marchaba a un parque en el extraradio de la ciudad, y pese a que algunos días las ganas faltaban y otros la lluvia lo imposibilitaba, siempre llegabamos a casa cargados de experiencia, y algun que otro balon rebentado. Pero los niños siempre se ganan un lugar dentro de ti.
Y nuestro hogar, o mejor dicho nuestro hostel. Pese a todo, hemos descubiertos el encanto de no tener soledad, estar siempre rodeados de gentes y de esperar el turno del baño. De la cocina cruda, o del no cocinar, o la cocina a presión. Con todo esto y mucho mas, hemos sobrevivivo, y lo que es aún mejor, lo hemos vivido. Gracias a estos compañeros que nos han acompañado, han sido nuestra pequeña familia, y han llenado los momentos de risas, de bromas, y de cariño.
Un gran gracias para ellos que han conseguido que esta experiencia se haga realidad. Un gran gracias a las asociaciones por darnos esta oportunidad.
Ucraina, un gran diaukuyu, por todo lo que nos has enseñado!