INTERCAMBIA – EUROPAERESTU.eu Europa Eres Tú
Os presentamos la experiencia de los jóvenes que han participado en un INTERCAMBIO del programa Erasmus+ en en ITALIA.
Todo comenzó una mañana de Octubre en el aeropuerto de Málaga donde nos reunimos Alba, Carmen, Francesca, Isabel, Marina y Sofía para emprender (nunca mejor dicho) nuestra aventura por tierras italianas.
A pesar de haber quedado con bastante antelación y que el madrugón estuviera incluido en el plan, una maleta (la famosa maleta verde) llena de por si acasos y varias cosas que se tuvieron que quedar en tierra fueron las culpables de que llegáramos al avión con destino Milán después de haber corrido una maratón por todo el aeropuerto.
Tras coger un autobús Malpensa-Milán, llegó el reto: encontrar el hostal. Después de varias respuestas de ciudadanos confusas, un guía erasmus y varios metros cogidos al fin llegamos al hostal California. Un lugar que en vez de playa tenía un recepcionista aparentemente timador aunque todo al final fue fruto del cansancio y las ganas de recorrer Milán.El día en Milán dió para mucho: visita al maravilloso Duomo, la galería Vittorio Emmanuelle, parada para un café con su bollo de Nutella correspondiente, paseo por Navigli y por la noche fiesta en Alcatraz! (Yussef te echamos de menos). En definitiva, se puede decir que hicimos de todo excepto comer pizza en un restaurante que no fuera chino.
Después de dormir escasas horas llegó el momento de iniciar la aventura hacia Ligonchio, en un autobús donde iríamos los participantes de este proyecto procedentes de: España, Italia, Finlandia y Turquia. Tras muchas curvas, siestas y nombramiento de todos los pueblos de Andalucía para amenizar el camino, al fin llegamos al hostal donde nos hospedaríamos toda la semana, el cual estaba situado en la montaña y contaba con unas vistas maravillosas, burros, buena comida casera y un futbolín. ¿Qué más se puede pedir?Una vez allí nos encontramos con los facilitadores de España, Brasil, Argentina, Italia, Turquía, Finlandia y México los cuáles guiarían el proyecto SEEDS II (Social Economy Entrepeneurship Development Skills). Al día siguiente, ya con el estómago lleno, empezamos el proyecto con actividades para conocernos mejor, tratar de recordar difíciles nombres y romper un poco el hielo antes de tratar el tema del proyecto en sí.
Los días siguientes se basaron en actividades sobre emprendimiento yendo desde el nivel más básico (aptos para el equipo español el cual era el menos entrepeneur) hasta conceptos y casos un tanto más difíciles añadido además a la dificultad del idioma pero aun así actividades dinámicas y originales. ¿Nuestro dia favorito? La mañana visitando a los adorables burros aunque no tan obedientes (¡Anita no me hace caso!).
Todas las noches tenían su aquel entre futbolines, conociendo a gente nueva y compartiendo experiencias pero sin duda la mejor la noche intercultural donde pudimos compartir delicias gastronómicas de cada país y algún que otro baile típico así como reguetón el cual todos sabemos que une culturas.
Un juego sobre debilidades y fortalezas personales unió participantes en distintos grupos, los cuales tendrían que formar un proyecto de acuerdo a sus intereses e ideales, llegando a elaborar, después de varios días de trabajo, interesantes proyectos que luego presentaríamos en una conferencia en Rozzano sobre emprendedores, de la cual aún esperamos ansiosos el nombre de nuestro ganador.
Nuestra aventura acabó de la misma forma que empezó: buena noche (aunque menos loca) en Milán, más kilos y menos maletas vivas, y una gran carrera en el aeropuerto. Así como un grupo español mucho más unido a causa de postureo, paseos, risas e intentos de pronunciación de entrepeneurship.
