Os presentamos la experiencia de un grupo de jóvenes que han participado en un INTERCAMBIO del programa ERASMUS+ en RUMANÍA.
Todo empezó enviando una encuesta para poder ser seleccionados a un intercambio en Rumania. En ese momento no éramos capaces de creérnoslo. Se nos presentaba una oportunidad de viajar y participar en un proyecto junto a personas de otros países para conocer más acerca de la realidad del medioambiente y qué podemos hacer nosotros para contribuir en su mejora.
En nuestra primera reunión juntos pudimos conocernos un poco y aprovechamos para
empezar a organizar el viaje. Una chica cordobesa, dos chicos malagueños, una chica
argentina-canaria y una chica de Burgos (donde según ella hacía mucho más frío que en
cualquier sitio de Rumanía).
Vuelos, noche intercultural… teníamos mucha ilusión y muchísimas ganas de poder participar en este proyecto.
En cuanto quisimos darnos cuenta ya era 27 de octubre y estábamos en el aeropuerto con nuestras maletas llenas de ilusión y comida española para la noche intercultural. Fue aquí
cuando emprendimos el viaje hacia el aeropuerto de Bucarest, donde primero conocimos a al grupo de República Checa y, tiempo después a los demás grupos, con los cuales formaríamos una gran familia durante 10 días.
En el aeropuerto, nos recogieron y nos trasladaron al que sería nuestro hogar durante una semana. Al llegar, conocimos a varios compañeros del grupo de Rumanía y al organizador del proyecto. Nos enseñaron el lugar y luego nos llevaron a nuestras habitaciones para que descansáramos tras el viaje.
Comenzaba el proyecto «Mama I wanna be green”.
Al día siguiente, conocimos al resto del grupo, con el que íbamos a compartir nuestra experiencia. En nuestro proyecto coincidimos con participantes de Bulgaria, Letonia, Rumanía,
Polonia, República Checa y Lituania.
Durante el proyecto, tuvimos la oportunidad de conocer más sobre cómo podemos nosotros contribuir con el medioambiente. Gracias a las distintas actividades organizados por los organizadores, pudimos darnos cuenta así de la realidad sobre esta situación en cada país y
cuáles son las herramientas que podríamos emplear nosotros en nuestro día a día para contribuir.
En nuestros ratos libres, disfrutamos de una excursión a los volcanes de lodo de Buzau, charlas con nuestros compañeros, y las noches interculturales de cada país, en las que enseñamos bailes típicos, comida e incluso vivimos cómo se realiza una buena barbacoa en Rumanía.
Para despedirnos de nuestros compañeros internacionales realizamos una gran fiesta final en Buzau, donde estuvimos alojados durante las dos últimas noches. Durante el día terminamos nuestra tarea final, que consistió en un espectáculo en el que hubo baile, canciones, teatro, desfile de moda e incluso un monólogo cómico, que llevábamos preparando desde los primeros días del proyecto.
Al caer la noche acudimos a una cena final donde lo pasamos muy bien, recogimos nuestro “Youth Pass”, y nos emocionamos mucho por despedirnos.
Nos despedimos de Rumanía, pero sin dudas este será un viaje que nunca olvidaremos y que
siempre tendremos en nuestro recuerdo. Nos volvimos a España con nuevos conocimientos en
la materia, y un montón de nuevos amigos.
Y tú… ¿Cuándo?
Si quieres recibir más información podemos fijar una cita a través del correo info@intercambia.org