EXPERIENCIA EN CROACIA

Os presentamos la experiencia de un grupo de jóvenes que han participado en un INTERCAMBIO del programa ERASMUS+ en CROACIA.

La adrenalina de viajar de noche, combinar los ronquidos de tu compañero de bus con las risas y el pavo en bucle de tus nuevas amigas con las que vas a compartir una gran experiencia, ese comenzó siendo el sabor a libertad y cambio de patrones en nuestras rutinas diarias en las que andábamos sumidas. Porque sí, al fin y al cabo son experiencias que te sirven para tomar aire fresco, conocer tu yo interior y darte a ti mejoras, en tu vida, en tus habilidades sociales, en tu círculo de amistades, salir de tu zona de confort y retarte en situaciones en las que no te pones habitualmente Vuelos, buses, caminatas a pie y arrastre de maletas con la séptima vida cual gato aventurero, todo
eso fue el comienzo para poder llegar a salvo a nuestro primer destino: Dubrovnik.

Lleno de gatos, de historia, atardeceres y mar, aprendimos bastante en ese día y medio sobre la ciudad gracias a nuestro gran guía, la pasión por su trabajo se apreciaba gratamente Dubrovnik fue el comienzo de unión entre el grupo de España, sabíamos que esa energía que se empezó a crear iba a traer buenas anécdotas de por vida.
Viaja con gente natural, espontánea y resolutiva y tendrás memorias para toda la vida y así olía ya nuestra conexión.

Tras más vuelos, Airbnb, conversaciones con extranjeros y alguna que otra confusión llegamos al destino principal de todo esta experiencia Durdevac, «yuryevac» o como puedas pronunciarlo para que te entiendan. Amables y simpáticos como que no, primer choque cultural jajajajaja Aunque las ganas y la actitud no nos la robaba nadie.

La voz cantante y el foco de atención siempre era nuestro en cualquier lugar Eslovaquia ganó puntos desde primera hora gracias a ellos no perdimos el último bus para ese tal Durdevac. Una vez allí y tras más experiencias con maletas, coches y otras historias del estilo, empezamos haciendo migas con el resto de participantes, griegos, macedonios y croatas. Un gran equipo el que formábamos. Quién nos iba a decir que esos extraños nos iban a hacer tan felices los próximos días y que, por supuesto, iban a tener para siempre un hueco en nuestro corazón.

Primera noche, entre los típicos silencios incómodos e intercambios de palabras comenzamos a romper el hielo con los que se iban a convertir en nuestros compañeros de aventura. Desde esa noche ya supimos que nuestros griegos iban a ser especiales, ya se notaba el parecido cultural que
existía entre ambos países y desde luego que risas no faltaron. Tras horas hablando decidimos acostarnos, nos quedaban muchos días por delante y bastantes charlas pendientes con todos ellos.

A partir de ahí empezó nuestra “convivencia internacional” que iba a estar repleta de buenos momentos y cuanto menos, locuras. Así, dimos inicio a este proyecto con un “icebreaker”, en el que conocimos el nombre y la procedencia de todos los integrantes además de sus hobbies, lo que nos permitió acercarnos más emocionalmente a nuestros “fellow travellers”.
Por supuesto y como era de esperar, en ese día reinó la vergüenza y las primeras impresiones, porello no pudieron faltar otras actividades más interactivas como fue la visita al centro de impresión 4D de este pueblecito tan acogedor.

Y tú… ¿Cuándo? 

Si quieres recibir más información podemos fijar una cita a través del correo info@intercambia.org